Mi experiencia me dice claramente que no. Usted puede encargarse perfectamente si se esfuerza en ello. Y no lo digo gratuitamente, sino con la experiencia de haber creado o ayudado a crear decenas de cuentas que hoy en día obtienen resultados muy superiores a los de la media de las empresas con presencia online.


Ser experto en Social Media no es diferente a ser experto en cualquier otra cosa. Por ejemplo, ¿cuántas empresas presentan sus impuestos o su contabilidad sin la ayuda de un asesor en la materia? Muchísimas. Pero claro, los asesores y expertos estamos para ayudar a personas que no tienen conocimientos o tiempo para dedicarse a esas cosas. De lo contrario, todos tendríamos que dedicarnos a otra cosa.

El problema concreto con las redes sociales es que la gente todavía no las toma realmente demasiado en serio. Muchos están ahí porque leyeron algún artículo en Internet o porque alguien (su asesor, un familiar o un amigo…) les dijo que tenían que estar ahí, que se podía revolucionar cualquier negocio con ello y que no se podían perder una oportunidad así.

Y claro, teniendo en cuenta la difícil situación económica que atraviesan amplios sectores de la sociedad, incluyendo negocios que ven como se están hundiendo lentamente y no saben que hacer para remediarlo… no es difícil que muchos  “prueben” a ver qué tal les va en esto de Facebook o Twitter.

Si analizamos esta situación de una manera lógica, nos daremos cuenta enseguida de que, si las redes sociales son herramientas, no basta únicamente con disponer de ellas, sino también aprender a utilizarlas de manera conveniente para nuestras necesidades. Y aquí es donde se presenta la elección entre aprender por uno mismo o contratar a un experto capacitado.


Porque es evidente que no tiene las mismas necesidades una persona que se dedica al marketing de afiliación de productos digitales que un pequeño comercio tradicional, ¿no le parece? Esta es una gran verdad, frecuentemente olvidada por muchos expertos en Social Media que utilizan el mismo método “probado” (nótese el entrecomillado) para todos sus clientes.

Y es que, por su juventud, todavía no existen métodos estandarizados a la hora de desarrollar estrategias de Social Media. Si quiere mi opinión, creo que jamás llegarán a existir, pues las redes sociales cambian frecuentemente, y lo que hoy funciona, mañana puede quedar obsoleto. Lo bonito del asunto es que cada uno puede desarrollar un estilo propio que funcione a la perfección.

Es por ello que, personalmente, en mis trabajos y formaciones prefiero centrarme en enseñar algunos principios basados en las enseñanzas del marketing y que son inmutables, antes que en la utilización dogmática de herramientas concretas pues, yo mismo, a lo largo de los tres años que llevo estudiando y aprendiendo técnicas de Social Media, he cambiado frecuentemente de herramientas y protocolos de trabajo.

Creo que contratar a un buen especialista en cualquier campo de trabajo ayuda a mejorar la productividad y los resultados de una empresa, siempre y cuando la elección se haya hecho de forma racional y no en base a “amiguismos” como parece dictar la tradición de este país. ¿Qué es lo mejor para su empresa? Infórmese, use el sentido común y es poco probable que se equivoque.